AYÚDALOS A DECIRLE NO AL ALCOHOL
Conforme los preadolescentes van creciendo, aumenta la probabilidad de que se vean expuestos al alcohol. Es prácticamente inevitable: llegará el momento cuando tengan que decir “sí” o “no” al alcohol. Quizás el momento les tome por sorpresa. Quizás intenten integrarse al grupo de los chicos populares y no se les ocurra una respuesta válida de inmediato. Por eso es mejor que tengan algunas respuestas ya listas. Por ende, hablar con tus hijos sobre cómo decir que NO es sumamente importante.
Cómo ayudarlos a decir “NO”
El psicólogo, terapeuta familiar y autor de ¿Cómo decirlo? A los niños, Paul Coleman, indica que “los jóvenes no deberían entrar en explicaciones extensas ni flojas. Decir algo como ‘no me parece buena idea… a mis padres no les gustaría…’ abre paso a un debate. Si la otra persona insiste en lograr que tu hijo(a) beba, podría debilitar la determinación de tu hijo”.
Según Coleman, la mejor estrategia es practicar respuestas breves y directas como:
“¡Ni loco(a)! Mis padres me castigarían por un mes”.
“Si dice que no constantemente, es probable que dejen de presionarlo tanto o tan a menudo”, explica Coleman.
Anthony Wolf, psicólogo clínico y autor de No te metas en mi vida: pero antes ¿me llevas al burguer? y Qué callar y qué decir al hijo adolescente, indica que decir “no” marca a los jóvenes como diferentes de sus compañeros –exactamente lo que la mayoría de los adolescentes no quiere que pase. Según Wolf, “el beber o no beber alcohol es uno de los factores que separa a los jóvenes cuando llegan a la adolescencia. Si su meta es no diferenciarse, nada de lo que digan va a funcionar por completo”. Si tu hijo(a) se aleja de los compañeros que consumen alcohol, ten en cuenta que posiblemente necesite un poco más de apoyo emocional.
¿Qué más puedes hacer?
Mantén a tus hijos informados y dales el apoyo que necesitan para tomar decisiones saludables y evitar el alcohol. Actualmente están desarrollando su autoimagen y hábitos a largo plazo, por lo cual querrás que se sientan bien sobre sí mismos y tomen decisiones saludables.
Déjales saber que pueden hablar contigo sobre cualquier cosa y, cuando lo hagan, Pregunta, Escucha, Aprende.
Quiérelos. Elógialos. Mantén tu mente y tu línea de comunicación y confianza abiertas.
Anímalos a que se mantengan saludables y participen en deportes, clubes escolares y otras actividades extracurriculares.