PASO 1: Obtén la información

Si tu hijo(a) te hace una pregunta sobre el alcohol pero no sabes la respuesta, no te preocupes. ¿Por qué? Porque AskListenLearn.org ha desarrollado estrategias y recursos comprobados, donde podrás obtener la información que necesitas para entablar conversaciones y contestar preguntas difíciles. Pero siempre es bueno tener algo de información antes de comenzar. Revisa la siguiente información antes de hablar con tus hijos.

¡Ojo!

• La edad importa: tomar bebidas alcohólicas afecta tu desarrollo cerebral si eres menor de edad.
• El alcohol afecta a las niñas y mujeres más rápido debido a la cantidad de agua en la composición de sus cuerpos.
• Mientras más pequeño sea el cuerpo, más rápido se afectará por el alcohol, y con cantidades menores.
• Algunas bebidas alcohólicas contienen mayor porcentaje de alcohol que otras. Un vaso de cerveza estándar es más grande que una copa de vino. Sin embargo, ambos contienen la misma cantidad de alcohol.
• Beber rápido es extremadamente peligroso, pues el cuerpo se satura rápidamente, al igual que con otras sustancias.

 

PASO 2: Aprovecha la oportunidad

¿Sabes cómo hablarle a tus hijos sobre el alcohol? No es tan difícil como crees. Pocas veces vas a tener que decir “tengamos una conversación seria”. La vida te dará muchísimas oportunidades para tener estas conversaciones breves. Algunas situaciones que pueden surgir son:

¡Ojo!

• Observar a alguien comportarse arriesgadamente
• Ver un anuncio en la televisión
• Oír algo en las noticias
• Comer juntos durante las festividades
• Planificar una salida nocturna
• Disfrutar de una bebida alcohólica por tu cuenta

Aprovecha la oportunidad y haz preguntas. Así es. Pregunta primero, no hables. Pídeles su opinión y pregunta qué han escuchado y observado. Así sabrás qué saben y qué no saben tus hijos. Escucha sus respuestas y luego ofrece tu opinión. En algunas ocasiones, la conversación será así de breve. En otras, profundizarán más.

Pero empieza desde temprano –cuando entren en escuela primaria– y no dejes de hacerlo hasta que hayan crecido. Recuerda: los estudios demuestran que los padres ejercen la mayor influencia en cuanto a las decisiones que los niños toman sobre el alcohol. Aunque no lo creas, te están escuchando.

 

PASO 3: Obtén la información

Los jóvenes hacen muchas preguntas y a veces es difícil saber cómo contestar, especialmente cuando sus preguntas tienen que ver con el alcohol.

Estos son algunos consejos para contestar esas preguntas y dirigir la conversación.

Los niños de edad preescolar necesitan respuestas breves cuando preguntan por qué no pueden probar eso que estás tomando: “El alcohol le hace daño a los niños. Es muy peligroso.”

Los niños en escuela primaria están preparados para recibir más información sobre por qué bebes alcohol en moderación: “Cualquier cantidad de alcohol es peligrosa para los niños menores de 21 años de edad, porque sus cerebros todavía están en desarrollo. Cuando los adultos toman alcohol, debe ser en moderación. Es igual a cuando comemos cosas que no son saludables”.

Los niños en escuela intermedia pueden aprender contigo sobre las razones por las que tomar hasta un poquito de alcohol, aumenta la posibilidad de que beban de manera arriesgada y peligrosa más tarde. Aquellos adultos que bebieron alcohol por primera vez antes de los 15 años son 7 veces más propensos a tener problemas con el alcohol, comparados con aquellos que comenzaron a beber después de los 21 años (SAMHSA, 2013).

Los jóvenes de secundaria o high school necesitan ayuda para desarrollar estrategias que puedan utilizar en contextos sociales cuando no quieran beber, pero se sientan incómodos si se abstienen. Sería útil tener una conversación honesta con ellos sobre por qué quieren o no quieren probar el alcohol y los riesgos asociados con ello. Tu adolescente necesita límites y normas, además de conversaciones respetuosas sobre sus decisiones. ¡Lee más consejos para los jóvenes de escuela superior aquí!

 

Experta en la crianza y el desarrollo de los jóvenes

Deborah Gilboa, MD, también conocida como la famosa Dra. G, es experta en la crianza y el desarrollo de jóvenes, y creó AskDoctorG.com. Gracias a su entusiasmo por criar niños con buen carácter, se ha convertido en el médico de familia predilecto, experta en crianza, autora, oradora e influencer en redes sociales. Es madre de cuatro varones y le brinda a su público herramientas sencillas para que los niños de 2 a 22 años de edad desarrollen las destrezas necesarias para sus vidas. La Dra. G es miembro de la Junta Nacional de Asesores de la Fundación para Fomentar el Consumo Responsable de Alcohol.